martes, 9 de noviembre de 2010

Contaminación Lumínica en el Parque Natural del Túria

La Universitat alerta de la contaminación lumínica en el Parc Natural del Túria
Los expertos avisan de los efectos nocivos para los animales y el equilibrio del ecosistema - Proponen eliminar farolas de bola o apagar edificios





LAURA SENA PATERNA El exceso de luz que emana de las ciudades del área metropolitana y que la atmósfera proyecta sobre el Parc Natural del Túria ha llegado a una situación "preocupante" para los expertos en la materia de la Universitat de València. Los nocivos efectos para la fauna, los recursos energéticos que se despilfarran y la pérdida del paisaje del cielo nocturno se han puesto de manifiesto en dos informes elaborados por distintos departamentos de la Universitat, según ha dado a conocer la Coordinadora en Defensa de los Bosques del Turia. El presidente de este grupo ecologista, Ángel Morales, presentó ambos documentos en la última sesión del Consejo Rector del parque y reclamó la adopción de medidas por parte de las administraciones.
El primero de los informes ha sido elaborado por el departamento de Astronomía y Astrofísica de la Universitat, que manifiesta su "preocupación por la degradación ambiental" del parque natural "prácticamente en todo su recorrido" por la contaminación lumínica, es decir, la emisión de luz directa o indirecta a la atmósfera de origen artificial. Esta luz interactúa con las partículas en suspensión en el aire o se refleja en las nubes, con lo que se forma un fondo luminoso que impide la necesaria oscuridad nocturna.
Este exceso de luminosidad incide sobre los animales "que pueden ser depredados más fácilmente" y sobre las plantas, que sufren mayor presencia de insectos polinizadores. La consecuencia es "un desequilibrio natural".
Los astrónomos también alertan sobre la pérdida del cielo estrellado en el área metropolitana, donde sólo se pueden ver algunos planetas y la luna, aunque hace tiempo se apreciaban las constelaciones y la propia Vía Láctea. La situación se considera una "perdida intelectual" porque aleja al individuo del contacto con el universo, lo que es especialmente negativo en un parque natural.
El segundo informe ha sido elaborado por la Facultad de Biología. El documento define el parque natural como un espacio de alto valor florístico y faunístico que necesitan "ser preservados de cualquier tipo de ingerencia o contaminación". Muchos de los animales vertebrados o invertebrados son "habitantes de noche" y necesitan oscuridad mientras que el resto necesita el descanso nocturno. Estos animales pueden ver "alterados y amenazados" sus ritmos por el exceso de luz. "La potencia, la capacidad de emisión lumínica de muchas instalaciones es muy superior a lo que la naturaleza puede soportar", dice el informe, lo que puede llevar a "la rotura de la cadena trófica, cambios en el comportamiento territorial y de nidificación de las aves, desorientación de aves migratorias" y otros.
Ambos informes alertan del "dispendio energético" que supone la contaminación lumínica y apuntan un paquete de medidas como el uso racional de la iluminación pública y privada, la sustitución del alumbrado convencional por luces de sodio de baja presión, la supresión de las farolas de bola en el entorno del parque, así como el apagado de edificios públicos o rótulos, el uso de luz roja en lugar de blanca o la creación de pantallas vegetales. También piden que se preste especial atención a urbanizaciones como Masía de Traver o Lliri Groc.

Los ecologistas piden a los ayuntamientos y al Consell que adopten medidas correctoras
El líder ecologista Ángel Morales remarcó en la Junta Rectora que la contaminación acústica sobre el Parc Natural del Túria es "un atentado contra el paisaje nocturno y la biodiversidad". Ángel Morales forma acude a este organismo como representante de las Universidades valencianas. En la sesión llamó la atención tanto la Conselleria de Medio Ambiente como los ayuntamientos, para que "se esfuercen en eliminar o minimizar este tipo de contaminacio?n" y reclamó que se adopten las recomendaciones que recogen los informes. Por su parte, los representantes de la Coordinadora se quejaron que en tres años no se ha avanzado en muchos aspectos en el parque ya que no está ni señalizado. Además, existen quejas de hurtos en los campos, especialmente desde la mayor afluencia de visitantes al parque fluvial, por lo que se pidieron que se señalicen como propiedad privada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario