En la edición del periódico Las Provincias del lunes 24 de julio de 2017
La confusión de competencias entre los ayuntamientos, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y Generalitat ha creado un vacío legal que bloquea el cuidado del entorno Cañas
que crecen sin control, focos de basura y socavones son algunos de los peligros
de este paraje natural que transcurre por la ribera del río.
Con el objetivo de proyectar en una misma dirección las
políticas medio ambientales de unos y otros consistorios municipales, de
diferente signo político, se creó en 2016 la Asociación de Municipios del
Parque Natural del Turia. Esta organización, presidida por el alcalde de
Riba-roja, Robert Raga, e integrada por once municipios, busca alcanzar un
acuerdo con la CHJ y la conselleria que defina las competencias de cada
administración y asigne los presupuestos necesarios.
Quico Pellicer, responsable de la Coordinadora de los
Bosques del Turia, indica que en muchos tramos las cañas llegan a crecer hasta
siete y ocho metros. Esta entidad realiza de forma voluntaria acciones para el
cuidado y limpieza del parque.
Edición electrónica del artículo http://www.lasprovincias.es
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